En Sāvatthī. De pie a un lado, esa deidad se dirigió al Buddha en verso:
«Viviendo en la jungla,
los pacíficos practicantes
toman una sola comida al día:
entonces, ¿por qué su tez es tan clara?
No se preocupan por el pasado,
ni ansían el futuro,
se alimentan de lo que Ven ese día,
por eso su tez es tan clara.
Como ansían el futuro
y se preocupan por el pasado,
los necios se marchitan,
como una caña fresca cortada».