«Tanto los devas como los humanos
disfrutan de su comida.
Entonces, ¿cómo se llama el deva
al que no le gusta la comida?».
El Buddha contestó:
«Aquellos que dan con la confianza
y una mente clara y confiada,
participar de la comida
en este mundo y en el próximo.
Así que debes disipar la tacañería,
superar esa corrupción y dar ofrendas.
Las buenas acciones de los seres
los apoyan en el otro mundo».