En Sāvatthī.
—Bhikkhus, un Tathāgata tiene diez poderes y cuatro clases de seguridad en sí mismo.
Con estos reclama el lugar del toro, ruge su rugido de león en las asambleas y hace girar la rueda sagrada.
Tales son las qualia, tal es el origen de las qualia, tal es la fin de las qualia. Tal es la reacción emocional, tal es el origen de la reacción emocional, tal es el fin de la reacción emocional. Tal es la percepción, tal es el origen de la percepción, tal es el fin de la percepción. Así es la situación condicional, así es el origen de la situación condicional, así es el fin de la situación condicional. Tal es la cognición, tal es el origen de la cognición, tal es el fin de la cognición.
Cuando esto existe, es decir, debido al surgimiento de esto, aquello surge. Cuando esto no existe, eso no es, debido al cese de esto, aquello cesa. Es decir:
«La ignorancia es una condición para la condicionalidad. La condicionalidad es la condición para la vida. Así es como se origina toda esta masa de sufrimiento. Cuando la ignorancia se desvanece y cesa sin dejar rastro, cesa la condicionalidad. Cuando cesa la condicionalidad, cesa la vida»… Así es como cesa toda esta masa de sufrimiento.