SN 22.59: La característica de lo que no soy “yo”

Hubo un tiempo en que el Buddha se encontraba cerca de Benarés, en el Parque de los Ciervos de Isipatana. Allí, el Buddha se dirigió al grupo de cinco bhikkhus:

—¡Bhikkhus!

—Venerable señor —respondieron.

El Buddha dijo esto:

—Bhikkhus, las qualia no soy “yo”. Porque si las qualia fueran yo, no conducirían a la aflicción. Y podría forzar a las qualia: «¡Que mis qualia sean así! ¡Que no sean así!». Pero como las qualia no soy “yo”, conducen a la aflicción. Y no puedo forzar a las qualia: «¡Que mi qualia sean así! ¡Que no sean así!»

La reacción emocional no soy “yo”…

La percepción no soy “yo”…

La situación condicional no soy “yo”…

La cognición no soy “yo”. Porque si la cognición fuera yo, no conduciría a la aflicción. Y podría forzar a la cognición: «¡Que mi cognición sea así! ¡Que no sea así!». Pero como la cognición no soy “yo”, conduce a la aflicción. Y no puedo forzar a la cognición: «¡Que mi cognición sean así! ¡Que no sea así!»

¿Qué os parece, bhikkhus? ¿Son las qualia imperecederas o perecederas?

—Son perecederas, Maestro.

—Pero si son perecederas, ¿son agradables o desagradables?

—Desagradables, Maestro.

—Pero si algo es perecedero, es desagradable y efímero, ¿es apropiado que se le considera así: «esto es mío, yo soy esto, sobre esto tengo control»?

—No, señor.

—¿Es la reacción emocional imperecedera o perecedera?… ¿Es la percepción imperecedera o perecedera?… ¿Es la situación condicional imperecedera o perecedera?… ¿Es la cognición algo imperecedero o perecedero?…

—Es perecedera, Maestro.

—Pero si son perecederas, ¿son agradables o desagradables?

—Desagradables, Maestro.

—Pero si algo es perecedero, es desagradable y efímero, ¿es apropiado que se le considera así: «esto es mío, yo soy esto, sobre esto tengo control»?

—No, señor.

—Por lo tanto, debéis ver realmente cualquier tipo de qualia: pasadas, futuras o presentes, subjetivas u objetivas, gruesas o finas, inferiores o superiores, lejanas o cercanas, toda qualia, con la episteme: «esto no es mío, esto no soy “yo”, sobre esto no tengo control».

Cualquier tipo de reacción emocional…

Cualquier tipo de percepción…

Cualquier tipo de situación condicional…

Verdaderamente debería ver cualquier tipo de cognición: pasada, futura o presente, subjetiva u objetiva, gruesa o fina, inferior o superior, lejana o cercana, toda cognición, con la episteme: «esto no es mío, esto no soy “yo”, sobre esto no tengo control».

Al ver esto, un discípulo de los nobles instruido se desilusiona con las qualia, con la reacción emocional, con la percepción, con la situación condicional y con la cognición. Al estar desilusionado, el ansia se desvanece. Cuando el ansia se desvanece, se libera. Cuando está liberado, sabe que está liberado.

Entiende: «El renacimiento ha terminado, la vida de renuncia se ha completado, se hizo lo que tenía que hacer, no hay retorno a ningún estado de existencia».

Eso es lo que dijo el Buddha. Satisfecho, el grupo de cinco bhikkhus estaba contento con lo que dijo el Buddha. Y mientras se hablaba este discurso, las mentes del grupo de cinco bhikkhus se liberaron de las tendencias subyacentes al aferramiento.

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