En Sāvatthī.
Sentado a un lado, el venerable Rādha le dijo al Buddha: .
—Señor, la gente habla del «ser vivo». ¿Cómo se define un ser vivo?.
—Rādha, cuando te aferras, te aferras fuertemente al deseo, el ansia, el deleite y el ansia por las qualia, entonces se habla de un ser. Cuando te aferras, te aferras fuertemente al deseo, el ansia, el gusto y el deseo de reacción emocional… de percepción… de situación condicional… de cognición, entonces se habla de un ser.
Supongamos que algunos niños o niñas estuvieran jugando con castillos de arena. Mientras no se deshagan del ansia, el deseo, el cariño, la sed, la pasión y el gusto por esos castillos de arena, los aprecian, los estiman, los atesoran y los tratan como propios. Pero cuando se deshacen del ansia, del deseo, del cariño, de la sed, de la pasión y del gusto por esos castillos de arena, los dispersan, los destruyen y los demuelen con sus manos y pies, de forma que no se puede jugar con ellos. De la misma manera, debes dispersar, destruir y demoler las qualia, de forma que no puedas jugar con ellas. Y debes practicar para acabar con el ansia. Debes esparcir, destruir y demoler las reacciones emocionales… la percepción… la situación condicional… la cognición, de forma que no puedas jugar con ella. Y debes practicar para acabar con el ansia. Porque el fin del ansia es Nibbāna.