—Bhikkhus, los médicos recetan un emético para eliminar enfermedades derivadas de trastornos de la bilis, las flemas o las flatulencias. Existe tal emético, no lo niego. Pero este tipo de emético a veces funciona y a veces falla.
Os enseñaré un emético noble que funciona sin fallar. Confiando en ese emético, los seres que son propensos al renacimiento, a la vejez y a la muerte, al sufrimiento, a la lamentación, al dolor, a la tristeza y a la angustia se liberan de todas estas cosas.
Escuchad y prestad mucha atención, hablaré…
—¿Y qué es ese noble emético que funciona sin fallar?
Para quien tiene la creencia correcta, se vomita la creencia incorrecta. Y se vomitan los muchos malos defectos producidos por una creencia incorrecta. Y debido a la creencia correcta, muchas cualidades meritorias se desarrollan completamente.
Para alguien con la disposición correcta, una disposición incorrecta es vomitada… Para alguien con el discurso correcto, un discurso incorrecto es vomitado… Para alguien con la acción correcta, una acción incorrecta es vomitada… Para alguien con la conducta correcta, una conducta incorrecta es vomitada… Para alguien con el esfuerzo correcto, un esfuerzo incorrecto es vomitado… Para alguien con la práctica correcta, la práctica incorrecta es vomitada… Para alguien con la concentración correcta, una concentración incorrecta es vomitada… Para alguien con episteme, un conocimiento incorrecto es vomitado…
Para quien tiene la liberación correcta, una liberación incorrecta es vomitada. Y se vomitan los muchos malos defectos producidos por una liberación incorrecta. Y debido a la liberación correcta, muchas cualidades meritorias se desarrollan plenamente.
Este es el noble emético que funciona sin fallar. Confiando en este emético, los seres que son propensos al renacimiento, a la vejez y a la muerte, al sufrimiento, a la lamentación, al dolor, a la tristeza y a la angustia se liberan de todas estas cosas.