AN 10.50: Argumentos

En cierta ocasión, el Buddha se encontraba cerca de Sāvatthī en la arboleda de Jeta, el monasterio de Anāthapiṇḍika. Ahora, a esa hora, después de la comida, al regresar de la ronda de limosnas, varios bhikkhus se sentaron juntos en el salón de reuniones. Discutían, reñían y peleaban, hiriéndose mutuamente con palabras envenenadas.

Luego, al final de la tarde, el Buddha salió de su retiro y fue a la sala de asambleas. Se sentó en el asiento preparado y se dirigió a los bhikkhus:

—Bhikkhus, ¿de qué estabais hablando sentados hace un momento? ¿Qué conversación quedó inconclusa?

—Señor, después de la comida, al regresar de la ronda de limosnas, nos sentamos juntos en la sala de reuniones, discutiendo, peleando y riñendo, hiriéndonos mutuamente con palabras hirientes.

—Bhikkhus, esto no es apropiado para vosotros, jóvenes de buena familia, que habéis pasado con fe de la vida hogareña a la vida sin hogar.

Hay diez buenas cualidades que crean cariño y respeto, conducen a mantener relaciones amistosas, a la armonía y a la unidad, sin peleas.

—¿Qué diez?

—En primer lugar, un bhikkhu es ético, es cumplidor del código monástico, se porta bien y busca limosna en los lugares adecuados. Al ver el peligro en la más mínima falta, mantiene las reglas a las que se ha comprometido. Cuando un bhikkhu es ético, esta cualidad afectuosa genera cariño y respeto, que le conducen a mantener relaciones amistosas, a la armonía y a la unidad, sin peleas.

Además, un bhikkhu es muy culto, recuerda y guarda lo que ha aprendido. Estas Enseñanzas son buenas al principio, buenas en el medio y buenas al final, significativas y bien redactadas, y describen una práctica que es completamente plena y pura. Es muy experto en tales enseñanzas, recordándolas, reforzándolas, recitándolas, analizándolas mentalmente y comprendiéndolas teóricamente…

Además, un bhikkhu tiene buenos amigos, compañeros y socios…

Además, un bhikkhu es fácil de amonestar, tiene cualidades que lo hacen fácil de amonestar. Es paciente y recibe las instrucciones con respeto…

Además, un bhikkhu es hábil e incansable en una amplia gama de deberes para con sus compañeros renunciantes, entendiendo cómo hacer las cosas para completar y organizar el trabajo…

Además, un bhikkhu ama las enseñanzas y es un placer conversar con él, estando lleno de placer en la Enseñanza y la Disciplina…

Además, un bhikkhu es resuelto y enérgico para renunciar a las cualidades perjudiciales y abrazar cualidades meritorias. Es fuerte, incondicionalmente vigoroso, no se afloja cuando se trata de desarrollar cualidades meritorias…

Además, un bhikkhu está satisfecho con cualquier tipo de ropa, limosna, comida, alojamiento, medicinas y suministros para los enfermos…

Además, un bhikkhu tiene memoria. Tiene el máximo cuidado y alerta, y puede recordar y memorizar lo que se dijo y se hizo hace mucho tiempo…

Además, un bhikkhu es sabio. Tiene la sabiduría que distingue entre el surgimiento y el cese, la cual es noble, penetrante y conduce al final completo del sufrimiento. Cuando un bhikkhu es sabio, esta cualidad benevolente genera cariño y respeto, y ayuda al Saṅgha a vivir en armonía y unidad, sin peleas.

Estas diez buenas cualidades crean cariño y respeto, conducen a mantener relaciones amistosas, a la armonía y a la unidad, sin peleas.

Scroll to Top