—Por tanto, debéis entrenar así: «Nuestras mentes se fortalecerán de acuerdo a nuestra vida de renuncia, y los estados mentales perjudiciales que surgieron no ocuparán nuestras mentes. Nuestras mentes se fortalecerán con las percepciones de perecibilidad, de la impersonalidad, de lo repulsivo y de los inconvenientes. Sabiendo lo que es justo e injusto en el mundo, nuestras mentes se fortalecerán con esa percepción. Sabiendo acerca del estado de existencia y el fin de la existencia en el mundo, nuestras mentes se fortalecerán con esa percepción. Conociendo el origen y el fin del mundo, nuestras mentes se fortalecerán con esa percepción. Nuestras mentes se fortalecerán con las percepciones de renunciar, desvanecerse y cesar». Así es como debéis entrenar.
Cuando vuestras mentes se fortalezcan con estas diez percepciones, se pueden esperar uno de estos dos resultados: la iluminación en la vida presente, o si queda algo, el no retorno.
