—Bhikkhus, no debéis haceros acompañar por un asceta con cinco defectos para que os siga en la ronda de limosnas.
—¿Qué cinco?
—Os sigue demasiado lejos o demasiado cerca. No toma vuestro cuenco cuando está lleno. No os advierten cuando vuestro discurso está al borde de una transgresión. Interrumpe mientras habláis. Y es tonto, aburrido y estúpido. No debéis haceros acompañar por un asceta con estos cinco defectos para que os siga en la ronda de limosnas. Debéis haceros acompañar por un asceta con estas cinco cualidades para que os siga en la ronda de limosnas.
—¿Qué cinco?
—No os sigue ni demasiado lejos ni demasiado cerca. Toma vuestro cuenco cuando está lleno. Os advierten cuando vuestro discurso roza la transgresión. No interrumpe mientras habláis. Y es sabio, brillante e inteligente. Debéis haceros acompañar por un asceta con estas cinco cualidades para que os siga en la ronda de limosnas.