Esto he oído.
En una ocasión, el Buddha se encontraba cerca de Sāvatthī en la arboleda de Jeta, el monasterio de Anāthapiṇḍika. Allí, el Buddha se dirigió a los bhikkhus:
—¡Bhikkhus!
—Venerable señor —respondieron.
El Buddha dijo esto:
—Un seguidor laico con cinco defectos se ve abrumado por la timidez.
—¿Qué cinco?
—Mata seres vivos, roba, tiene relaciones sexuales con la mujer de otro, miente y consume bebidas alcohólicas que provocan negligencia. Un seguidor laico con estos cinco defectos se ve abrumado por la timidez.
Un seguidor laico con cinco cualidades está seguro de sí mismo.
—¿Qué cinco?
—No mata seres vivos, no roba, no mantiene relaciones sexuales con la mujer de otro, no miente ni consume bebidas alcohólicas que causen negligencia.
Un seguidor laico con estas cinco cualidades está seguro de sí mismo.